lunes, 18 de febrero de 2013

Inseguridad

Queridas princesas y principesos:
La verdad es que hay amistades que merecen la pena. Como me dice Lorena, por uno que se meta en tu vida y te destroce, habrá muchos que sean capaces de hacerte feliz; hay que abrirse.
Pues resulta que eso me ha pasado. Hace unos 5 meses conocí a una chica con la que nunca pensé que llegaría a tener una relación de ningún tipo, ni amistad, ni nada. Resulta que desde que la conozco, estoy mejor. Sé que puedo confiar en ella, y me anima cuando estoy de bajón. Hacemos el idiota juntas y lo pasamos bien, pero también es capaz de pararme los pies, mirarme todo seria y decirme 'nena, empieza a valorarte, porque tienes motivos. Los demás no tenemos que ponerte nota, pero tú tienes que estar segura y a gusto contigo misma, que ya va siendo hora'. De verdad, solo cinco meses, y ya no sé qué haría sin ella.
Es curioso que sea justo esta chica la que me diga esas cosas, porque su hermano es el chico que me gusta, y ella lo sabe. No sé si trata de crearme falsas esperanzas, aunque es verdad que siempre me mantiene los pies en la tierra diciéndome que él no quiere novia, como mucho un royo, pero que si de verdad me gusta lo intente. Creo que él es el chico inadecuado en el momento inapropiado. Esas cosas tienden a pasarme.
Supongo que todo esto está muy relacionado aunque no lo parezca, porque si no me infravalorase de esta manera, no me habría enamorado de un chico que sé que no puedo tener, si no fuese tan insegura se lo habría dicho, y para bien o para mal tendría una respuesta. Si hubiese tenido mi respuesta enseguida, no me habría hecho amiga de su hermana para que me diese consejos y me ayudase, y si no me hubiese hecho su amiga, no tendría a nadie a quien contarle mis problemas y que me apoye en los momentos en los que siento que tengo los pies en arenas movedizas y no tengo donde agarrarme.
Como siempre en mi cabeza, nada tiene ninguna lógica.

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